Durante esta etapa la mujer sufre cambios hormonales, trastornos del sueño, ansiedad, cansancio, depresión, sofocos y se produce una bajada de los niveles de estrógenos, esta disminución es importante porque los estrógenos reducen el colesterol, metabolizan las grasas, favorecen la circulación y disminuyen la tensión arterial, como consecuencia se producen ciertas alteraciones, el metabolismo se ralentiza, hay una mayor retención de líquidos, y la grasa tiende a acumularse en la zona abdominal
Uno de los problemas que se producen es el aumento de peso, que puede pasar de ser una cuestión estética a un problema de salud, originando problemas de corazón, diabetes del tipo 2, aumenta el riesgo de sufrir problemas óseos y perjudica las articulaciones, además de afectar en gran medida a la autoestima de la persona.
Que podemos hacer para mantener el peso y que cuidados debemos tener en esta etapa:
- Ejercicio regular, caminar casi una hora al día (el ejercicio genera endorfinas y evita el deseo por el dulce). Tomar el sol 20 minutos para fijar el calcio, pero siempre, aún en invierno, con protección 50.
- Mantener una dieta entre las 1.550 y 2000 Kcal., dependiendo de la estructura física de la mujer.
- Incorporar en la alimentación el Triptófano ya que reduce la ansiedad y ayuda a conciliar el sueño (carnes magras, pollo y pavo, pescados azules, huevos, frutos secos, chocolate negro…).
- Aumentar el consumo de ácidos grasos Omega 3 y 6 que mejoran nuestro sistema inmunológico y nos protegen frente a enfermedades cardiovasculares. Modificar el consumo de grasas saturadas, poco saludables por grasas insaturadas, aceite de oliva virgen, aguacate y frutos secos.
- Consumir alimentos con estrógenos naturales, fitoestrógenos, que se encuentran en alimentos de origen vegetal.
- Algunos nutricionistas recomiendan alimentos drenantes (piña, fresas, frutos rojos, espárragos, etc.), alimentos que contengan hidratos complejos y fibra (verduras, cereales integrales, legumbres…). Decantarse por dietas pobres en grasas y sodio ya que el colesterol y la tensión arterial suelen aumentar por el descenso de los estrógenos, cocinar al vapor o al horno, evitando fritos y rebozados y tomar mucha fruta y verdura.
- Beber dos litros y medio de agua.
- Por supuesto se deben evitar hábitos y alimentos que favorezcan los síntomas de la menopausia y el aumento de peso, como fumar, consumo de alcohol, refrescos ricos en azúcares y los alimentos procesados con un alto índice de sal y grasas.
Como complemento a una nutrición y unos hábitos más saludables existen tratamientos estéticos que nos ayudarán a mantener nuestro abdomen a raya y reducirán nuestro volumen corporal, entre estos tratamientos podríamos destacar nuestro “Tratamiento Corporal Integral” que engloba varios tratamientos que se irán aplicando en las distintas sesiones programadas en función de las necesidades de cada persona. Este tratamiento es el “todo incluido” en la estética, dependiendo de las necesidades de las personas y según vayan avanzando las sesiones utilizaremos Láser Lipólitico y Ultrasonido para ablandar la grasa localizada, Maderoterapia / Metaloterapia o Masajes y Radiofrecuencia para movilizar, reducir, drenar y reafirmar y por último Presoterapia para seguir drenando. Además disponemos del mejor tratamiento que existe para seguir trabajando en casa con un producto que se activa a lo largo del día.
Por lo anteriormente expuesto ya no tienes excusa para mantener una figura estilizada y evitar engordar en esta etapa de tu vida.